El comentario de esta semana era redactar en el blog el tema expuesto en clase el día anterior, mi parte de la exposición es la siguiente:
La financiación de otro modelo de actividad económica
La principal causa de la crisis fue un mala gestión de la banca en la que utilizó el dinero público para
tapar sus agujeros, estos siguieron especulando en los mercados financieros. El resultado fue: los problemas de financiación de la economía continuaron y la banca siguió sumando beneficios pero a costa de un mayor endeudamiento del Estado.
La deuda pública
Los gastos en aumento y los ingresos bajando llevaron a la necesidad de endeudamiento público, es decir, a pedir prestado a quienes tienen dinero.
Garantizar la financiación
Los bancos tienen la misión de proporcionar fondos para la inversión y el consumo, haciendo así que la economía prospere y se creen puestos de trabajo.
Sin embargo, en los últimos treinta años los bancos han dejado de financiar de forma eficaz la actividad productiva. En lugar de ello han desplazado la mayor parte de ese ahorro a los procesos especulativos en los múltiples mercados financieros, haciendo que una parte mínima de la sociedad se haya lucrado con actividades que no benefician a la economía y que la empujan hacia crisis como la actual.
Reforzar la regulación y la vigilancia
Los reguladores han permitido durante estas últimas décadas que los bancos y las grandes empresas llevaran a cabo todo tipo de prácticas financieras que ponían en grave peligro a la economía. Ni el Fondo Monetario Internacional ni el Banco Central Europeo han impedido los procesos especulativos que
nos han arrastrado a la crisis.
Depurar responsabilidades
La depuración de las responsabilidades es una tarea inmediata y esencial. Las dificultades de las finanzas públicas se deben a la crisis financiera por lo que es una barbaridad exigir que quienes no tuvieron responsabilidad en el origen de la crisis.
Y es a la vez inadmisible que los verdaderos responsables de la crisis que la han permitido y fomentado no paguen por hacer mal su trabajo.